San Esteban, mártir (Festividad 26 de Diciembre)
San Esteban, fue un diácono, considerado el protomártir, primer mártir cristiano. Es uno de los pocos santos, al margen de los apóstoles o la propia familia de Jesús, que aparece mencionado en los Evangelios canónicos.
La figura de san Esteban se encuadra a principios del siglo I, momento en el que el Cristianismo era considerado una secta más del Judaísmo.
Según los Hechos de los Apóstoles, Esteban era el líder de los siete diáconos nombrados por los apóstoles en defensa de los judíos helenistas, esto es, aquellos judíos de la diáspora que hablaban griego a pesar de vivir en Jerusalén. Desde esta posición, Esteban denunciará las preferencias que la Iglesia daba a los judíos hebreos frente a los judíos helenistas, condenando a su vez el uso del Templo de Jerusalén como asiento de la idolatría contraria a la Ley de Moisés y afirmando que sólo Jesús estaba llamado a espiritualizar el culto del templo.
Estas ideas chocaron con los intereses materiales de la casta sacerdotal y con las creencias del pueblo judío, lo que acabaría incomodando a los fariseos de algunas sinagogas, quienes acusaron a Esteban ante el Sanedrín de blasfemia contra Moisés y contra Yahveh. La asamblea lo considerará culpable y Esteban sería lapidado a las afueras de Jerusalén mientras, según la tradición, oraba por sus verdugos, diciendo <Señor, no les tomes en cuenta este pecado>.
Entre los participantes se encontraba el futuro San Pablo, que aparentemente no participó en el apedreamiento, sino que se limitó a cuidar la ropa de los que lo hacían.
A la muerte de Esteban, el grupo de los helenistas se dispersó por Palestina y Antioquía, donde la prédica se hizo incluso a los paganos.
El martirio de san Esteban supondrá el final del Cristianismo como secta del Judaísmo, al separar el culto cristiano del culto judío practicado en Jerusalén. Los helenistas sentaron las bases del Cristianismo concebido como una religión universal, no exclusivamente judía, concepto que más tarde llevaría a su máxima expresión San Pablo y que se ratificaría en el Concilio de Jerusalén.
San Esteban es un santo muy popular cuyo culto está extendido por todo el mundo, le están dedicados innumerables templos, ciudades, pueblos e instituciones cristianas.
Según la tradición, al menos parte de su cuerpo se encuentra sepultado en la Basílica de San Lorenzo Extramuros de Roma, donde además se conserva como reliquia la piedra sobre la que sufrió el martirio.
Actualizado el día 26 de Diciembre de 2018.